Las bombas de vacío de anillo líquido, y los compresores de anillo líquido utilizan una fase líquida como elemento compresor en lugar de pistones u otros elementos mecánicos. Debido a que el rotor de la bomba está descentrado respecto al estator, el anillo de líquido que se forma durante la rotación deja un volumen disponible al gas que no es simétrico. El gas entra en la zona de mayor volumen, y es conducido hacia la zona de menor volumen y por lo tanto abandona la bomba a mayor presión de la que entró, dado que la misma masa de gas ocupa ahora un menor volumen.
Teniendo en cuenta que se está poniendo en contacto un gas o vapor con un líquido, es posible seleccionar el líquido adecuado para realizar un proceso determinado en este tipo de bombas de anillo líquido, por ejemplo de absorción de algún componente volátil presente en el gas o vapor que pasaría a la fase líquida.
Este tipo de bombas y compresores se suministran con componentes auxiliares, comúnmente se trata de un separador gas-líquido, con la consiguiente recirculación y reincorporación del líquido compresor hacia la bomba, y un intercambiador de calor que evacúa el calor generado debido a la compresión.
En condiciones extremas, que predominan en los procesos húmedos y mojados, es normal que se produzcan depósitos calcáreos o abrasión y, por lo tanto, una reducción significativa en el rendimiento de la bomba. No obstante, las bombas de anillo líquido hacen frente a estos desafíos.
El uso de materiales de alta calidad, como acero inoxidable y cerámica, garantizan una máxima fiabilidad y características de funcionamiento uniformes durante muchos años.
